Para medir la salud y proyecciones de importantes centros económicos y productivos en Guantánamo, el viceprimer ministro cubano Jorge Luis Tapia Fonseca, y una comitiva gubernamental visitan la provincia más oriental de Cuba desde este lunes, como parte también del seguimiento y control a las medidas trazadas para dinamizar los sectores agrícola y empresarial.

Foto: Ariel Cecilio Lemus

En su afán por conocer el balance de los resultados tras el duro golpe de la pandemia, Tapia Fonseca estuvo en Baracoa donde dialogó con especialistas de la Estación Agroforestal Baracoa, institución que vincula la producción de cacao con la ciencia. Allí se interesó por el funcionamiento del Banco de Germoplasma, el trabajo de los técnicos y el vínculo con el campesinado.

Durante su estancia en la Primada verificó el estado de la Fábrica de Chocolate, lista para arrancar en poco más de 100 días, y acudió a la Fábrica de Coco, que dadas las afectaciones del ciclón a los cocoteros permanece inactiva, por lo que llamó a pensar en alternativas para darle uso a esa tecnología.

El viceprimer ministro conversó con productores sobre la aplicación de las 63 medidas de la agricultura y con pescadores, para conocer qué les limita o impide lograr mayores capturas para garantizar la venta de proteínas a la población.

Tapia Fonseca también estuvo en Imías, en la zona de Aguada de la Palma para intercambiar con la familia de los Pérez, campesinos criadores de ovino-caprino, quienes han logrado en los más intrincados parajes multiplicar las cabezas de ganado y ahora se insertarán en la crianza de equinos.

A su paso por San Antonio del Sur, el dirigente acompañado del ministro de la Agricultura, Ydael Jesús Pérez Brito, y el de la Industria Alimentaria, Manuel Santiago Sobrino Martínez, fue a la fábrica de conservas del Valle de Caujerí, responsable de procesar unas 7 000 toneladas  de alimentos. En estos momentos la instalación está en proceso de mantenimiento con vistas a la campaña de enero 2022, pero está llamada a seguir diversificándose y darle mayor valor agregado a sus producciones, meta en la que se trabaja incluso para el mercado en MLC.

En Carrera Larga, poblado de El Salvador, estuvo la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, para chequear los avances como parte del programa de reanimación de bodegas comunitarias. Allí 11 serán los locales que se recuperarán, para beneficio de los pobladores del llano y la montaña.

Sobre la implementación del servicio de mensajería, especialmente para casos vulnerables y disminuir las molestas aglomeraciones, indagó la ministra, quien se preocupó además por la calidad en la prestación de servicios, la estabilidad de los productos de la canasta básica y el estado constructivo de las unidades gastronómicas locales, las que -insistió- deben gestionar más ofertas a partir de elaboraciones con recursos endógenos, contratados a los campesinos de la zona.

Díaz Velázquez insistió en avanzar en la implementación de las nuevas tecnologías en instalaciones del Comercio, para la promoción y ventas online, así como el pago electrónico que favorece la contabilidad e incluso permite a las bodegas servir como una suerte de cajero al pueblo como parte de las nuevas opciones que brinda el Banco para las comunidades de difícil acceso.

La comitiva ministerial seguirá su senda por Guantánamo en el Central Argeo Martínez, fomentando el diálogo franco con los trabajadores y el pueblo en general, como medidor de cuánto se ha hecho y queda por hacer. El recorrido que empezó por Villa Clara continurá este miércoles hacia Granma y luego Holguín, como parte de la voluntad del país de acompañar cada paso en el camino al perfeccionamiento del modelo económico social.